Bomba Schoklender
Prendió el ventilador y salpicó a varios funcionarios. Es hora de explicaciones rápidas y de que haya justicia.
El rapi moto. Sergio Shocklender.
Por ahora la bomba de fragmentación SS no hirió a Cristina, pero sí al corazón de su gobierno. La Presidenta parece a salvo, lejos de todas las maniobras delictivas y repugnantes que denunció Sergio Schoklender en Noticias. El “hijo” elegido por la jefa de las Madres de Plaza de Mayo conoce desde adentro el poder kirchnerista. Porque lo integra desde hace años años de la mano de Hebe de Bonafini. Por eso se abren tantas preguntas que, hasta que no sean respondidas ante la Justicia, permanecerán clavadas como esquirlas en los cuerpos de varios de los hombres (y mujeres) más poderosos y poderosas de la Argentina. Las más graves que se desprenden del evangelio según Schoklender son:
* ¿Hacia dónde conducían las puertitas del Sr. López? Porque el secretario de Obras Públicas de la Nación, José López, lugarteniente del ministro Julio De Vido, recorría el país con su valijita ofreciendo cordón cuneta y asfalto a intendentes amigos y recaudaba todo lo que podía. ¿Asfaltaba para la corona o para la Fundación Felices Los López? ¿Llegaba alguna Samsonite a la quinta de Olivos, tal como ocurría con las que llevaba Ricardo Jaime?
* ¿A eso se refiere SS cuando dice que cuando murió Kirchner todo cambió? A Lopecito lo define como “un hijo de remilputas y ladrón”, pero más allá de los eufemismos asegura que “está acusado por enriquecimiento ilícito” y reclama que se investigue la empresa que tiene con su esposa en Tucumán y a la que le derivan fondos del Estado. Sin embargo, a Néstor, el gran estratega y fundador del modelo, le adjudica otro rol: “Los grandes negocios los manejaba Néstor con De Vido y Roberto Baratta”. Después reconoce y justifica que para hacer política hay que quedarse con vueltos o retornos, porque de lo contrario sólo podrían hacerlo millonarios previos a la militancia, como Francisco de Narváez y/o Mauricio Macri. Un argumento similar utilizaron en su momento Cristina Fernández y Diana Conti sobre la fortuna que afanosamente logró el matrimonio presidencial: “No se puede hacer política sin plata”. Dan ganas de mandarlas a que le pregunten al Pepe Mujica, Tabaré Vazquez, Ricardo Lagos, Michelle Bachellet, Arturo Illia, Raúl Alfonsín y Hermes Binner, entre muchos otros.
* Aníbal Fernández, jefe de Gabinete, quien estará en la línea sucesoria después de Cristina y Amado, maneja a un juez federal como Norberto Oyarbide “como un muñequito”. Teléfono para el Congreso de la Nación: ¿habrá algunas explicaciones que dar respecto de la independencia de los poderes?
* Amado Boudou, presidente de la nación cuando Cristina esté de viaje a partir del 10 de diciembre y posible delfín de ella para las elecciones del 2015 –si no fuerzan la reforma constitucional para habilitar una nueva reelección– firmó un crédito Bicentenario de 10 millones para que SS montara una planta productora de paneles para la construcción. Ese mismo crédito fue refrendado por otra ministra estrella como Débora Giorgi y un casi ministro todo terreno como Guillermo Moreno. ¿Estará ese papel entre los que SS le entregó al juez y que éste colocó en su caja fuerte? ¿Habrá guardado una copia el obsesivo SS? Boudou tiene otras explicaciones que dar junto a su amigo Abel Fatala. Porque nunca se rindió cuentas del dinero que gastaron en su importante campaña publicitaria. Schoklender dice que un millón y medio de pesos salieron del bolsillo de las Madres. El dinero de los impuestos de todos los argentinos que debería volver al pueblo en obras, vuelve a la caja política en dinero sucio e ilegal.
* ¿Cuáles son los otros traidores además de los hermanitos parricidas que Hebe amenaza dar a conocer? Porque Fatala y Lopecito tenían (siempre según SS, que conste en actas) oficina propia en el tercer piso de la Fundación. ¿Puede una consultora y encuestadora como Doris Capurro cobrar un servicio a las Madres de Plaza de Mayo? ¿Qué encuesta querían hacer? Es vox pópuli que una de las formas de evadir la ley electoral es pedirle a empresarios amigos que compren y paguen encuestas con preguntas que le interesan al Gobierno. ¿Pero era necesario hacer semejante truchada también con una entidad humanitaria como las Madres a la que, según los periodistas K, los periodistas anti K querían ensuciar? Esa es otra gran pregunta que el futuro responderá. ¿Quién ensució los derechos humanos? ¿Quién expuso a Hebe y a otros dirigentes a la misma lógica del toma y daca del punterismo clientelista? ¿Será cierto que cuando Hebe dijo hace unos días que Néstor fue el mejor compañero que tuvieron las Madres era una forma de decir que no se fijaba en tantos detalles obsesivamente como lo hace Cristina? El mejor compañero que tuvieron las Madres fue Vicente Zito Lema, la novia del barrio, la que puso el cuerpo y arriesgó la vida cuando eran pobres y vendían choripán para solventar la universidad. Después llegaron los matrimonios por conveniencia y eso es otra cosa.
* ¿Cuándo descubrió Hebe que SS era un chorro y traidor? Porque Zito Lema y otros dignos militantes de los derechos humanos honestos se lo hicieron saber hace más de ocho años. Y en mayo de este año, cuando estalló el escándalo, en la página de la Fundación Sueños Compartidos sólo había elogios y agradecimientos para la notable gestión de Sergio, “un hasta luego y no un adiós”. El texto fue levantado de inmediato de la Web, pero periodistas no militantes tomaron la precaución de “capturarlo” y archivarlo. ¿Fue un intento de la entidad de encubrir a SS u otro tipo de complicidades?
* El periodismo que trabaja (por dinero o convicciones) para el Gobierno pasó sin sonrojarse por varias pantallas. Primero fue el grito en el cielo porque Magnetto y La Nación (y sus esbirros) querían ensuciar los pañuelos blancos. Era todo mentira. Un invento de los medios hegemónicos. Después encontraron la carnadura ideológica: vienen por el corazón ético del proyecto nacional que son las Madres. Finalmente, cuando la propia Hebe acusó a su ex hijo virtual, comenzó el proceso de satanización para convertir a SS en el chivo expiatorio. El excéntrico Sergio no era un invento de los periodistas destituyentes: era un despreciable delincuente que había abusado de la ingenuidad de las madres y de la inocencia de Aníbal, Amado, López, Fatala, Felisa Miceli (que no puede salir del pantano de los billetes fantasmales) y hasta, con dolor lo escribo, de la casa de 480 mil dólares y la camioneta oculta de Alejandra, la hija de Hebe.
* La última es la madre de todas las preguntas: Aníbal, Amado, Fatala, López y Felisa, entre otros, ¿tomaron decisiones por sí mismos o se limitaron a recibir órdenes?
* Y de ser así, ¿órdenes de quién?
Nada es para siempre...Comentado y publicado por Miguel...
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