15/12/2011
| LUIS LABRAÑA Y SUS REPLANTEOS |
| "La historia une y la memoria divide" |
| El ex militante montonero, que disertó en nuestra ciudad, cuestionó la política del gobierno nacional en materia de derechos humanos y aseguró que la lucha de los '70 fue una guerra. "Mucha gente del kirchnerismo actual dice ser lo que no fue", agregó. |
| La frase del historiador francés Pierre Nora, quien dijo que la historia no debe confundirse con la memoria, fue utilizada por el ex montonero Luis Labraña para cuestionar la política de derechos humanos del kirchnerismo y asegurar que el enfrentamiento setentista no fue una lucha desigual, sino una guerra. Pese a haber formado parte de los cuerpos más activos de las agrupaciones subversivas --también integró las Fuerzas Armadas Revolucionarias-- y de haber sufrido el exilio, este licenciado en lingüística de 64 años se considera un ex guerrillero "equivocado", pero no "arrepentido", porque "el arrepentimiento tiene que ver con la ingratitud y la traición". Encolumnado detrás de sus enemigos de ayer --en 2009 visitó a algunos militares presos en Campo de Mayo--, Labraña no duda en afirmar que si los revolucionarios hubieran tomado el poder habrían reprimido con la misma fuerza que lo hizo el Estado. "Hoy hay una mirada sesgada de la realidad, pero no de la historia. La memoria no es la historia, porque es afectiva y depende en gran parte de lo mágico. Es un pulpo que late en todos los cerebros que fueron modificando. La historia une y la memoria divide. El relato nunca es la historia, es la visión de alguien de la historia. Hicieron creer que estos hombres que juzgan eran malos y que salieron a la calle a pegarles a chicos indefensos. No fue así, fue una guerra", sentenció. Antes de disertar en nuestra ciudad el pasado jueves sobre "Contienda de los 60-70. Circunstancias, Sacralización y Prospectiva", el conferencista dialogó con "La Nueva Provincia" sobre pasado, presente y futuro. Aseguró que los denominados juicios por delitos de lesa humanidad tienen un trasfondo que, a su criterio, es muy preocupante. "A esta gente no la están culpando por lo que hizo, están destruyendo las Fuerzas Armadas y su capacidad de poder ante las inminentes invasiones que vamos a sufrir, ya sea en el sur, por los intereses petroleros, de minería, agua y pesca, o en el norte, en la frontera con Bolivia, por metales", afirmó. Izquierda, peronismo y cárcel Nacido en el seno de una familia de extracción comunista, Labraña comenzó su militancia de joven, aunque en 1964 abandonó la izquierda y se enroló en el peronismo, por contar con varios amigos nacionalistas. Se sumó al Movimiento Revolucionario Peronista, dirigido por Gustavo Rearte, luego pasó a las Fuerzas Armadas Peronistas y así llegó a Montoneros. "Quedé a cargo de una de las unidades de combate, pero me fui por discutir con la cúpula. Yo era más democrático, más peronista. Después, el 14 de febrero de 1973, caí preso en el gobierno de Alejandro Lanusse y, cuando me liberaron, meses después, Montoneros me quería fusilar, pero me ayudaron las FAR", relató. Excluido, pasó a ser activista en unidades básicas del barrio de Flores y después del golpe del 24 de marzo de 1976 vivió oculto y debió exiliarse, primero en Brasil y luego en Holanda, donde cursó sus estudios universitarios. "Mucha gente del kirchnerismo actual dice ser lo que no fue. Incluso, tengo un hermano que dice haber sido montonero y no fue nada. Aparece en su Facebook, diciendo `gracias...' y `te lloramos...', pero no fue nada. Creo que con el sol salieron los perejiles, que alguien los recoge para usarlos con beneficio político", opinó. Volviendo a la guerra antisubversiva, afirmó que "bajo ningún punto de vista" hubo 30 mil desaparecidos y que, a lo sumo, fueron 11 mil. "En la época pusimos esa cifra porque era necesario para asustar a Europa con el genocidio; esa palabra lleva a Hitler y así se demoniza", explicó. De todas maneras, rechazó la teoría de los dos demonios y afirmó que se trataba "de dos ángeles", con intereses nobles de ambas partes. "Nunca se estudió la génesis de esa revolución. Yo no lo veía en ese momento, pero ahora veo clarísimo que las directivas venían de Cuba. No entendía que nadie quería una revolución, sino desestabilizar a Estados Unidos en medio de la Guerra Fría y crear muchos Vietnam para darle potencia a la Unión Soviética", sostuvo. Labraña cuestionó el "facilismo" de la frase "terrorismo de Estado", porque --agregó-- el brazo ejecutor oficial enfrentó a un verdadero ejército. "Nosotros, solamente en el sector peronista, éramos alrededor de 120 mil tipos, no todos armados, pero cualquiera estaba dispuesto a agarrar las armas. La lucha urbana contra nosotros tuvo que buscar formas inéditas, como nosotros las buscamos en principio. Y en esa lucha cayó gente inocente, por supuesto, como en toda guerra. Desde el Peloponeso hasta ahora siempre sucedió", dijo. Por último, confesó estar de acuerdo con que no hay olvido ni perdón. "No hay posibilidades de conciliar, pero sí hay que buscar la concordia, que es reconocer que nuestros hijos y nietos (de militares y guerrilleros) están en el mismo colegio y tenemos que apuntalarlos, no mirar para atrás", aseveró. Objetivo: rearmar la inteligencia Luis Labraña trabaja para potenciar un referente de centro-derecha en el país y destaca la "necesidad" de rearmar los cuadros de inteligencia, porque "la gente está desmoralizada y los sectores populistas avanzaron hasta límites insospechados". "Son tiempos de sacrificio, como cuando los inmigrantes venían a trabajar la tierra y morían de manera miserable, para que el hijo fuera doctor. El pago nuestro va a ser la nueva inteligencia", anunció. Acerca de la política de gobierno actual, expresó que el kirchnerismo "no tiene una estrategia de poder" y que es contradictorio hablar de progresismo cuando "lleva al país hacia el monocultivo". "Ganaron las elecciones con 800 mil chicos que no hacen nada más que fumar paco, marihuana, darse `un saque' y salir al bailongo, que son los hermanitos de los `pibes chorros' y los wachiturros. Votaron todos los delincuentes habidos y por haber en las cárceles y todos los inmigrantes peruanos y bolivianos, a los que le dieron el DNI para votar. Es una invasión", señaló. Para Labraña, es necesario no sólo generar una nueva inteligencia, sino refundar el Estado, que está "carcomido". No obstante, reconoció que Cristina Fernández obtuvo más del 70 por ciento de adhesión, porque --dijo-- quienes votaron a Hermes Binner también la apoyaron indirectamente y admitió que, pese a haber votado a Eduardo Duhalde, la oposición, hoy, es "incapaz y obsoleta". "Acá no hay opciones, o terminamos como Chávez en Venezuela o como Ceausescu en Rumania (gobernó entre 1965 y 1989 y fue ejecutado luego de una revolución popular). Las dos cosas son malas", cerró. Por la Verdad Històrica, publicamos en este blog, las palabras y pensamientos de un guerrillero, terrorista, Luis Labraña. Dejamos en claro que para nosotros los terroristas guerrilerros no son "ex", siempre seràn terroristas y guerrilleros. Comentado y publicado por Miguel... |
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