Reinaldo Dal Bosco
Un 16 de octubre de hace 40 años, a Verónica y a Sandro, la violencia de una Argentina insoportable los hermanó en el dolor. A Vero se lo contaron… Sandro tuvo el triste privilegio de ver a su padre descosido a balazos en la esquina de su casa.
El mismo día en el mismo lugar, una mañana, una banda de asesinos que firmaban sus partes de guerra con el nombre de Montoneros, asesinó al papá de Sandro y al abuelo de Vero de doscientos tiros en una esquina de Adrogué.
No hay palabras que expliquen tanto llanto. No hubo justicia nunca, que pudiera calamar en algo, una sensación de que los horribles nos ganaron con la violencia.
A 40 años, los asesinos de aquella mañana de octubre, nos gobiernan con sus doscientos balazos como bandera de impunidad.
Hace apenas unos días, la profesora Fernanda Megías, pagó con sumario y suspensión en La Rioja, el precio de pretender contar historias como las de Reynaldo, el papá de Sandro, o como las de Raúl Sanguinetti, abuelo de Vero. La verdad de los que entonces mataban por la espalda, se defiende hoy haciendo callar a los que osan recordar la historia.
Si la historia la escriben los que mataron… eso quiere decir que hay otra historia… la Verdadera Historia.. quien quiera oirla.. lea:
“No me olvidé de vos abuelo, pero a medida que voy creciendo mi dolor va siendo reemplazado por el orgullo de haber sido tu nieta, el amor que te tendré hasta el último día de mi vida y la inmensa lástima que siento hacia las personas ( y sus familias)que en pos de "sus ideales" te asesinaron y luego ajustaron los derechos humanos a su humana conveniencia.
Siendo muy pequeñita aprendí el significado de la palabra terrorismo, de adulta entendí que los hijos y nietos de quienes lo ejercieron hacia vos son dignos de mi lástima.Yo me quedé con el orgullo de ser la nieta de un hombre de bien, yo soy la nieta de Raúl y ellos ... bueno, ese es su problema.”
Verónica Sanguinetti.
Me mintieron abuelo
Una enorme mano sosteniendo la mía aún diminuta, unas alverjillas coloridas y olorosas. .. Ahí se desvanece mi recuerdo, el único” propio” que tengo de vos abuelo, por que lo demás me lo contaron y... me mintieron
Hoy en un nuevo aniversario de tu muerte tengo que contártelo
Me dijeron que te había matado el terrorismo en plena democracia ,que un día fuiste a trabajar y te asesinaron de más de 150 balazos, me mintieron abuelo, me dijeron que eras un buen hombre, un trabajador que amaba a su patria, me dijeron que nuestra familia quedó destruida, me contaron que los derechos humanos eran para todas las personas, que la justicia siempre llega, me mintieron, me engañaron, por que ahora me dicen que no existieron los terroristas sino los jóvenes idealistas y que lo único que hacían era pegar y repartir panfletos, por que merecías morir ya que tenías puesto tu uniforme de policía, y si eras policía eras un hombre malo, por que no eran balas si no ideas revolucionarias relacionadas con la justicia social las que te masacraron, cómo me mintieron abuelo! Yo voy a ser cómplice y seguiré creyendo en una partecita de esa gran mentira, la parte de “la justicia siempre llega” por que es la que sustenta todas las verdades que existen hoy en mi vida, por que el olor de las arvejillas aún perdura en mi ser abuelo y eso lo recuerdo no me lo contaron.”
Verónica Sanguietti.
Espero no parecer reiterativo pero cómo ya muchos saben este día no es un día mas para mí...., hoy me decía la flaca que yo tengo que tomar éste día de otra manera y lo peor es que sé que tiene razón, pero mi respuesta fue sencilla y sincera, trato pero a veces no puedo.
Papá era buen tipo, papá era respetuoso, amigable, inteligente, buén padre, buén amigo, buen hijo, buen hermano, papá era amoroso, papá era sincero, pero por sobre todo eso papá era mi papá y hace mucho que no lo tengo y lo extraño.
40 años han pasado, la misma cantidad de años que el vivió, y cuando leo fb esta mañana lo primero que veo es una foto de Gerardo Romano diciendo que "los montoneros mataban con respeto". Guau, MATAR CON RESPETO" sería algo así cómo violar con amor?????
Yo me pregunto ahora,,,, y me gustaria que algun k me contéste y trate de explicarme con respeto por favór, Cómo puedo o podría yo sentirme el día de hoy emocionalmente igual que cualquier otro día de mi vida???Recuerdo mi época de adolescente y mas grandulón también esos 16 de Octubre, algunos mas tristes que otros, algo normal o natural podríamos decir creo yo, pero lo que siento ahora es que además de haberlo cagado a tiros salvajemente en la esquina de nuestra casa matándolo casi delante de nuestros ojos y huyendo cómo huyen las ratas salvajes, cuando apenas tenía yo 9 años, ahóra además siento que me quieren hacer sentir y convencer de que ellos eran los buenos y tipos cómo mi viejo eran los malos y bien muertos están,,,,porque????Porqué papá tenía un cargo muy importante en una empresa multinacional grande cómo Pirelli y mi papá defendió los intereses de la Empresa que le daba de comer a él y a su familia, y eso para los montoneros fue suficiente y justificó matarlo como a una rata en la esquina de casa. Esos mismo también quieren darme a mí desde hace un tiempo clases de Derechos Humanos, guau, la puta che, la verdad amigos creo yo que me piden mucho a veces, aunque lo peor es que se que tienen razón...Ya se termina este día triste pero lo mejor es que mañana, ya mañana yo a papá lo recuerdo siempre con amor, respeto y alegría.
Buenas noches y gracias a todos los que en un día como hoy se toman el tiempo de expresarnos a todos los Dal Bosco y familia su presente.
Sandro Dal Bosco
Reinaldo Dal Bosco: ¡Ni Olvido ni Perdón!
Ingeniero italiano, 40 años, casado y con dos hijos de 6 y 9 años.
La empresa Pirelli le había destinado como gerente general a la fábrica Facetyt en Remedios de Escalada. En esa fábrica no había entonces ningún conflicto gremial pero la Pirelli-Cables de la que era filial estaba siendo afectada por una huelga, y como éstas se ganaban expeditivamente con "ejecuciones de la justicia popular", el Sr. Dal Bosco fue sentenciado por los burguesitos universitarios que en la década del setenta se ungieron con los óleos sagrados de la lucha armada por la Patria Socialista.
El 16 de octubre de 1975, cuando salía de su domicilio en Adrogué para dirigirse a su trabajo, fue rodeado por un comando terrorista que ametralló su coche matando en el acto al ingeniero y a su custodio; el cabo de la Policía Federal Raúl Arturo Sanguineti, miembro de un grupo especial creado ante la oleada de secuestros y asesinatos de empresarios y ejecutivos.
Las columnas SUR y LA PLATA de Montoneros se adjudicaron el asesinato, pero la Embajada de Italia no presentó ninguna reclamación ante la justicia argentina.
Reinaldo Dal Bosco fue uno de los 58 ejecutivos y empresarios que los terroristas asesinaron para 'aumentar su presencia política en la clase obrera y enseñarles a los negros que con los fierros las huelgas pueden ganarse en pocos días'. Un hermano de Reinaldo, también amenazado, se había marchado a Venezuela
Monstruosas y estúpidas muertes de personas que también eran trabajadores asalariados y que, como en el caso del Sr. Dal Bosco y otros ejecutivos de empresas extranjeras asesinados, se mantenían al margen de la política argentina.
Cabo PFA - Raúl Sanguineti
Como jefe del Servicio de Información Montonero, Rodolfo Walsh fue uno de los máximos responsables del asesinato del ingeniero Dal Bosco, porque todas las operaciones requerían un trabajo previo de información sobre el 'objetivo', que era supervisado por su Servicio.
Pero ahora, bajo los gobiernos Kirchneristas, a este asesino en serie formado en Inteligencia por la Stasi en Cuba, le dedican calles y plazas en su condición de "escritor y periodista" desaparecido durante el terrorismo de Estado. Asimismo, las 'Madres' de Bonafini cada tanto le rinden homenaje en su local; y la Facultad de Periodismo de la ultraizquierdista Universidad de La Plata, ha creado un Premio Rodolfo Walsh que ya concedió a la antigua terrorista erpiana María Seoane, artífice de esa farsa llamada La noche de los lápices, y al antiguo terrorista tupamaro Eduardo Galeano.
Obviamente, los nombres de los asesinos del Sr. Dal Bosco figuran en el siniestro muro del Parque de la Memoria dedicado a terroristas aniquilados legalmente durante la guerra civil revolucionaria por ellos iniciada.
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